Exportar «cualquier cosa» a Rusia
En este post hablamos de productos industriales, pero las directrices que aquí se indican valen en realidad para cualquier tipo de producto.
Ya nos gustaría que la normativa rusa en tema de certificación fuera siempre tan clara y meridiana, tal y como hemos visto hablando de vinos, o incluso sencilla y ligera, como en el caso de los azulejos. Pero en la realidad, siempre que aparecen productos industriales, como puede ser material eléctrico, componentes de automoción, equipamiento técnico de cualquier tipo, empiezan los problemas de cara a determinar la certificación necesaria para exportar a Rusia o a la Unión Económica Euroasiática.
Y si, como hemos visto, muchas veces surgen dudas acerca de la certificación necesaria para exportar vino o baldosas a Rusia, con más razón no nos queremos aventurar en ningún post en el que se pretenda simplificar una materia tan compleja y a veces hasta impredecible cual es la certificación de productos industriales. En en este caso preferimos ponernos del lado de la empresa exportadora de una manera lo más honesta posible y reconocer que, de antemano, pocas generalizaciones se pueden hacer y que hay que mirar caso por caso, producto por producto.
Dicho de otra forma, la manera más rápida para saber si un producto requiere un Certificado GOST R o un Certificado EAC o un Declaración de Conformidad GOST R o una Declaración de Conformidad EAC o cualquier otro certificado, es la de pasarnos toda la información que indicamos a continuación a través de correo electrónico (info arroba gost-standard.es). Acto seguido, nosotros nos activamos sin compromiso, estudiamos el caso y emitimos una valoración definitiva normalmente en menos de 24 horas.
También recibimos peticiones a través de nuestro formulario, pero siempre replicamos solicitando una información más detallada, con lo cual, si se tienen las ideas claras, lo mejor es contactarnos directamente por email adjuntando todo lo que sigue:
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Código arancelario del producto
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Fichas técnicas
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Uso previsto
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Certificaciones de las que ya se dispongan
La partida arancelaria, o código HS o Taric, es la primera información que solicitan nuestros laboratorios de certificación. Es muy importante proporcionar el dato correctamente, si hay dudas conviene consultar un directorio online o la propia Cámara de Comercio.
Las fichas técnicas deberían estar en inglés y no es necesario adjuntarlas todas en el correo electrónico. Si éstas están disponibles en la página web de la empresa podemos descargarlas nosotros y así de paso conseguir alguna foto del producto. La presentación visual del producto es muy útil porque a veces revela fallos en la partida arancelaria. Eso sí, es imprescindible que el cliente nos indique, exactamente, qué productos quiere certificar. Parece mentira pero a veces se nos remite a un catálogo de decenas de productos y se nos dice que hay que certificar "dos de ellos". Demasiada confianza en nuestras capacidades adivinatorias... 🙂
En el caso de un producto que sea componente de otro entendemos dos cosas por "uso previsto": necesitamos saber en qué otro producto se integrará y a dónde irá a parar el producto final. ¿Está destinado a uso industrial o doméstico o ambos? ¿Si está destinado a la construcción, a qué tipo de edificios? ¿Va a operar en una atmósfera explosiva?
De estas preguntas depende por ejemplo de si será necesario conseguir un Certificado GOST R Contra Incendios o de si el producto entra dentro de un ámbito ministerial por el cual ya haya que solicitar otro tipo de certificado, como por ejemplo un Registro Estatal.
Por otro lado, esta pregunta marca también los límites de nuestra capacidad de actuación. Si el producto está destinado a un uso militar, no lo podremos certificar.
Finalmente, conocer si el producto ya dispone de certificaciones en ámbito CE o en otros ámbitos, nos ayuda a estimar la duración del procedimiento certificativo y sobre todo las posibilidad de finalizarlo con éxito.
Photo credit: VioLum