Esperando el fin de las sanciones. Rusia racionaliza la agricultura BIO
En enero entra en vigor la norma GOST R 57022 que regula la agricultura bio en Rusia. Una oportunidad para cuando se normalicen las relaciones comerciales.
Recordatorio para cuando Rusia retire las sanciones y las restricciones a las importaciones: dentro de unos pocos días entrará en vigor una nueva normativa que regula y racionaliza la producción biológica rusa y que permitirá conseguir una certificación para la que el sector del biológico español parece más que cualificado.
Estamos hablando de la normativa GOST R 57022 que se hará efectiva a partir del día 1 de enero de 2017 y que se denomina: "La producción orgánica. El procedimiento de certificación voluntaria".
Por su mismo título, vemos que se trata de una certificación GOST R de tipo voluntario, y que, por lo tanto, no tiene repercusiones a nivel de despacho aduanero. Sin embargo, teniendo en cuenta los años de ventaja que lleva la agricultura biológica europea a la rusa, muchas empresas europeas lo solicitarán en cuanto puedan, con tal de poder satisfacer la creciente demanda rusa de este tipo de frutas y hortalizas.
La normativa tiene como objetivo introducir criterios únicos en un sector en el que ya existen otras normas, a menudo contradictorias, que certifican si un producto vegetal ha sido obtenido sin utilizar aditivos químicos, o fertilizantes sintéticos o transgénicos.
Para conseguir la deseada racionalización, la GOST R 57022 está basada en normas de referencia de la Unión Europea (Reglamento CE 834/2007 del Consejo de 28 de junio de 2007 sobre producción y etiquetado de los productos ecológicos) así como en las indicaciones de IFOAM (Federación Internacional de Movimientos de Agricultura Orgánica).
Esperamos que el cuadro geopolítico futuro permita el retorno a la normalización comercial entre UE y Rusia: en ese caso se abrirían interesantes oportunidades para exportar a Rusia fruta y verdura "bio" española. Mientras tanto, siempre nos queda la opción de recomendar maneras inteligentes de "burlar" las sanciones.
Photo credit: Alba Casals